Capítulo
12: Adoración
1. Dios no acepta la falta de integridad
del hombre. Adorar a Dios requiere interrumpir el estilo de vida indiferente.
Uno no puede seguir a Dios sin dejar atrás algunas prácticas. Pero aquí debemos
tener mucho cuidado de que los hombres no nos llenen con sus propias reglas.
Confundir la voz de Dios con la voz de los hombres resultará en un desastre
espiritual. El pueblo de Israel debería pensar ahora en la tierra de Canaán y
no en el desierto. Los ídolos que encontrarían en el camino deberían ser
destruidos. La adoración no se realizaría según sus deseos, como fue el caso de
Caín, sino de acuerdo con todos los detalles que Dios había ordenado. Una nuevo
gozo sería conocido por aquellos que iban a vivir en la tierra prometida. La
forma de ser de cada uno afecta en la conducta de un grupo, pero no es así como
debería ser. Las actividades de una vida errante en el desierto se cambiarían
por un nuevo estilo de vida. La visión humanista no tendría lugar. Las
prácticas de los hombres estarían bajo el mandato de Dios (v. 1-14).
2. Se respetan las preferencias
personales, pero habría requisitos no negociables en el culto y la práctica del
pueblo de Israel en la tierra de Canaán. Un ejemplo era la comida con sangre.
Si era una privación para algunos, deberían pagar el precio, porque Dios no
permitiría una práctica pagana de banquetes regados en sangre. Su lazo con el
mundo de la época los alejaría de Dios, por lo que no era una cuestión de
nacionalismo que destruye todo lo que no
es nacional, sino un alejamiento de los matrimonios que llevarían la idolatría
dentro de la nación. Las opiniones personales no deberían guiar al pueblo, sino
la Palabra de Dios (v. 15-32).
“Israel
no debía rendir ningún tributo de sacrificio a otros dioses, ya que un intento
imposible de servir a dos señores sería rebeldía contra el gran mandamiento del
pacto de Dios. En la tierra prometida, la ley del altar central implicaría
tanto la centralización de las fiestas de
sacrificios especiales ... como la descentralización de las fiestas familiares
comunes ... "[1]
Lo
que debe ser interrumpido para seguir y adorar a Dios (Deut 12)
1.Interrupción de la vida en el desierto
(v.1)
2. Interrumpir los altares de los ídolos
(v.2-4)
3. Interrumpir la elección personales(v.5-6,11)
4. Interrumpir la alegría en las cosas
del mundo (v.7,12)
5. Interrumpir la forma arrogante de ser
(v.8)
6. Interrumpir las actividades errantes
en el desierto (v.9-10)
7. Interrumpir la visión humanista (v.13-14)
8. Interrumpir las preferencias
personales cuando entren en conflicto con la voluntad de Dios (v.23)
9. Interrumpir los lazos con el mundo
(v.29-31)
10. Interrumpir las opiniones personales por
la Palabra de Dios (v.32)
[1] Comentário Bíblico Moody -
Deuteronômio, pg.40 – editado por Charles
F. Pfeiffer (Impressa Batista Regular São Paulo – SP – 4ª impr. 2001)
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