sábado, 8 de agosto de 2020

Salmo 7

Salmo 7: Los desarrollos de la historia de aquellos que confían en Dios

1. El título Cus, un hombre benjaminita, se refiere a Saúl, que era hijo de Quis, en hebraico "Kish". Otros piensan que se trata de Cus, que es Etiopía. No tenemos forma de saberlo con certeza, pero sabemos que David estaba siendo perseguido por Saúl. La vida de David estuvo llena de acontecimientos positivos y negativos. Mucho más positivos. La vida de quienes confían en el Señor tiene cierto desarrollo, y la vida de quienes confían en sí mismos tienen otros. No tenemos control sobre todo lo que sucede en nuestra vida, sin embargo, el desarrollo que presenta la vida de cada persona son predecibles según la forma de vida que lleve. La historia de quienes confían en Dios se desarrolla de una manera maravillosa. Dos aspectos de la vida del justo son el establecimiento firme y la alabanza.

2. La vida de David estuvo marcada por una persecución injusta, pero esto no significa que en el desarrollo de su vida veamos a un hombre amargado y enojado. Al contrario, vemos a un siervo humilde clamando y confiando en el único que puede librarlo, que es Dios (v.1).

3.David no quería que su vida se desarrollara como presa en la boca del león. El creyente que abre la historia de su vida y solo ve amargura, frustración e incredulidad es como una víctima en la boca del león, destrozada e inútil. Satanás es el león rugiente que rodea a los creyentes en busca de una víctima para devorar. Este no puede ser el desarrollo de la historia del siervo de Dios (v.2).

4.David fue acusado de querer matar a Saúl y por eso Saúl estaba tan furioso con él, además de, por supuesto, ser usado por Satanás y movido por la envidia. Si Saúl fuera razonable en su juicio, vería que David nunca quiso su mal. Incluso cuando tuvo la oportunidad de matarlo, no lo hizo por temor a Dios y por considerarlo “ungido por el Señor”. David confiaba en la justicia de Dios y estaba listo para someterse al juicio del Señor. Su conciencia no lo acusaba, sin embargo, dejaba el juicio en manos de Aquel que juzga con justicia (v.3-5, ver 1 Cor 4:1-5).

5. El desarrollo de la vida de David no revela un hombre cruel, sino sumiso al Señor. Quien vive así puede pedirle a Dios que lo vengue con justicia. Reconoce que todos los pueblos deben volverse al Señor, el juez recto. La historia nos muestra un desarrollo muy diferente. Los pueblos hacen su propia justicia y luchan por intereses egoístas (v.6-7).

6. David confía en Dios, pero también espera que su integridad lo ayude. Quien es honesto y vive rectamente espera que Dios lo recompense por caminar con Él. ¿Será que si alguien desenvuelve la historia de nuestra vida, vería integridad en alguno de los pliegues? (v.8).

"Para que no imaginemos que la integridad es sólo un concepto tosco y parcial, perteneciente a la piedad del Antiguo Testamento, los discípulos cristianos del Nuevo Testamento también testifican de muchas maneras de la integridad, ante Dios y los hombres, en la que vivieron conscientemente"[1].

7. De los diversos desarrollos en la vida de David, todos están marcados por su firmeza. Dios lo estableció. Hay promesas de que el reino de David será establecido para siempre. La vida del creyente debe desarrollarse firmemente en la Palabra de Dios. Todos deberían ver que nuestra historia está marcada por la firmeza en el Señor. Él es quien establece la vida de los justos (v.9).

8. Otro desenvolvimiento de la vida de David es la alabanza. En varios aspectos de su vida vemos a un hombre feliz alabando a Dios. El gozo de David estaba en Dios, quien se convirtió en un escudo para él (v.10).

9. La certeza de David en el juicio de Dios se ve claramente en el desarrollo de los salmos y libros de Samuel. La figura de Dios como un arquero debería hacernos estremecer. El Señor afila su espada, toma el arco y lo prepara. El objetivo es seguro contra aquellos que provocaron su ira (v.11-13).

10. El impío sentirá el dolor de su iniquidad. Toda la obra del pecado es mentira. El hoyo que cavó el pecador es profundo y él mismo caerá en él. La obra del pecado es como si alguien cavara la base de una roca encima de él. La roca caerá sobre tu propia cabeza. Si seguimos el desarrollo de la vida del que no confía en el Señor, veremos su triste final, si no se arrepiente y cambia de actitud ante el Señor (v.14-16).

11. Por otro lado, el desarrollo de la vida del fiel creyente es solo alabanza. Las luchas son intensas y difíciles, pero el creyente debe escribir alabanza y firmeza en los pliegues de su vida. La confianza del creyente está en Cristo y Él es el pastor de nuestras almas y no nos dejará solos en la historia de nuestra vida que se desarrolla por la eternidad. Tal vez deberíamos tomar una hoja de papel en blanco y hacer un acordeón con varios pliegues. En cada pliegue escribimos una victoria lograda, una bendición recibida o una pelea enfrentada. Deberíamos intercambiar nuestros papeles plegados con otros hermanos y abrir cada pliegue y luego ver de una vez lo que Dios ha hecho en nuestras vidas y en las vidas de nuestros hermanos. Son estos desenvolvimientos los que nos testifican que debemos permanecer firmes en la Palabra y alabar a Dios con todo nuestro corazón y depositando en Él toda nuestra confianza,  para que las personas que abren nuestra historia vean un desenvolvimiento que glorifique a Dios (v.17),

Salmo 7: Los desenvolvimientos de la historia de aquellos que confían en Dios
1. El justo es establecido (v.1-9)
2. Los justos cantarán alabanzas a Dios (v.10-17)


[1] Sermon Bible Commentary, Sl 7.8 - Edited by the Rev. W. Robertson Nicoll, Published in 1888-1893; public domain (extraído de e-sword version 11.0.6 – 2016)

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