Salmo 33

Salmo 33: Los involucramientos de Dios

David estaba huyendo de Absalón, pero podía encontrar en su corazón motivos para alabar a Dios. La naturaleza es enfatizada en este Salmo. La creación de Dios es una buena razón para confiar en Él, porque si Él tuvo todo bajo control al formar las estrellas y los mares, Él también puede controlar nuestras vidas, incluso en medio de las dificultades. Si puso toda la creación en orden, también puede hacer que nuestras vidas funcionen para Su propia gloria. De este salmo surgió la frase que se convirtió en el lema de muchos (Bienaventurada la nación cuyo Dios es Jehová). Es correcto que el creyente quiera que esto le suceda a su país, pero tenemos que admitir e interpretar que esta verdad solo es posible para la nación de Israel, elegida incondicionalmente por Dios. En el reino de Cristo, sí, esta realidad será para todos los pueblos. El salmista también enfatiza que la batalla no la ganan los caballos de guerra, sino el Señor (v.1-22).

"Este texto defiende el secreto de la prosperidad nacional y la superioridad entre las naciones del mundo, si de hecho, tuviésemos, y su enseñanza, si es parte de esa nación, causará nuestra gloria actual como la gloria de la antigua Roma, Sidón o Tiro"[1].

Salmo 33: Los involucramientos de Dios

1. El involucramiento de Dios en Su creación (v.1-9)

2. El involucramiento de Dios con las naciones (v.10-17)

3. El involucramiento de Dios con su pueblo (v.18-22)

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[1] The Biblical Illustrator – Sl 33.12 - By Joseph S. Exell, M.A. - Published in 1900; public domain (extraído de e-sword version 11.0.6 - 2016)