Capítulo
11: La Torre de Babel.
La característica del hombre es vivir
independientemente de Dios. El plan de Dios era que los hombres habitaran la
tierra y no un lugar específico. Los hombres rebeldes ya sabían esto, así que idearon
un plan de concentración alrededor de un edificio. A partir de entonces, la
humanidad se obsesionó con los monumentos que los distinguen de otros pueblos y,
aparentemente, les dan un orgullo nacional. Los planes humanos fueron
frustrados por Dios pues fue fácil separar a los hombres a través de la comunicación
truncada. A partir de ahí, los idiomas separaran a los hombres. Una vez más, se
cita a los descendientes de Sem, ahora con el propósito de trazar la
descendencia hasta a Abram, Sara y Lot (v. 1-32).
“La
'torre' que construyeron en Babel era una estructura conocida como 'zigurat'.
Los arqueólogos han descubierto varias de estas enormes estructuras construidas
principalmente con fines religiosos ".[1]
[1] Comentário
Bíblico Expositivo do VT Vol. 1 Pentateuco – pg. 77 – Warren W. Wiersbe
(Editora Geográfica – 1ª edição 2006)
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