Restaurar Sistema

Restaurar sistema.

Estos son mis principios. Si no le gustan… tengo otros.

La frase pertenece al humorista norteamericano Groucho Marx, pero expresa la mentalidad vacilante de un sistema que va mutando sucesivamente sus valores, hasta trastornarlos por completo.

Así encontramos gente que lucha por liberar las gallinas, pero anhela exterminar seres humanos en el vientre de su madre. Gente que tiene ideas brillantes para usar el patrimonio de otros, mientras acrecienta descaradamente el propio. Gente que se lamenta al ver pobreza, injusticia, violencia, depresión, suicidio y embarazo adolescente, pero aplaude a quienes promueven el consumo de alcohol, drogas y la promiscuidad sexual.

En la Biblia Dios establece principios y valores para que el ser humano alcance su máximo potencial individual y colectivo. Pero rehusaron tenerlo en cuenta. Eligieron un camino que deliberadamente ignora al Creador, pero se horrorizan del resultado. "Profesando ser sabios, se hicieron necios".

Durante el mes de la Biblia consideramos, en 250 palabras, algunos valores que este Libro Sagrado propone y que podrían aliviar muchos de los males endémicos de la sociedad. La Biblia deja claro que nada va a cambiar aplicando mejores políticas, porque todas parten de una premisa errónea: El hombre es bueno. Y no lo es. La raíz del problema yace en su corazón engañoso y perverso.

Jesús decía que del corazón salen todas las maldades que contaminan al hombre. Esa condición no puede ser modificada externamente. Por eso la Biblia propone Restaurar Sistema. Así se llama una prodigiosa herramienta de Windows que permite devolver una computadora al estado en que se encontraba en un momento dado. Si por error o ignorancia se modifican o eliminan archivos de programa, o el sistema se malogra de alguna forma, esta función lo deja como nuevo.

El concepto bíblico es semejante, pero se llama “nuevo nacimiento”. Es la regeneración total del ser humano producido por el Espíritu Santo en todo aquel que cree en Jesús como salvador personal. Dios nos “resetea”, nos comunica vida abundante y eterna, nos proporciona una mente renovada para “no vivir ya según los criterios del tiempo presente”, sino de acuerdo a la buena, agradable y perfecta voluntad de Dios.

Estos son nuestros valores. No tenemos otros. No queremos otros.

Si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. 2 Corintios 5:17

Por Pablo D. López