Capítulo
3: La confirmación de Samuel y la descalificación de Elí
1. Samuel estaba aprendiendo el trabajo
del sacerdocio. Las visiones y revelaciones de Dios eran raras, por lo que a
Samuel no le tocó una época de facilidades. Elí era muy viejo y ciego. Samuel
dormía de noche junto al Arca de Dios, un lugar adecuado para recibir alguna
visión o mensaje de Dios. Recordamos a Zacarías, quien fue visitado por un
ángel en su turno. Dios le habló a Samuel en una época escasa de revelación
divina. Eso mostraba una confirmación de Dios. El joven que no estaba
acostumbrado al oficio y menos aún a las revelaciones de Dios buscó la ayuda de
Elí, quien lo ignoró. La tercera vez, Elí no puede ignorar que Dios le estaba
hablando al joven. Sería un gran desafío para Eli reconocer la aprobación de Dios
de la vida de Samuel. El joven Samuel está dando sus primeros pasos hacia un
contacto más cercano con Dios (v. 1-10).
2. Dios le muestra a Samuel que, de
hecho, él es el escogido para el sacerdocio y que Elí fue rechazado. No porque
estuviera viejo, sino porque no había correspondido a lo que Dios quería. Es
muy decepcionante terminar el ministerio descalificado. Samuel haría parte de
una transición que traería temor a todos, porque no era tan común que un líder
de la nación fuera apartado y reemplazado por un joven. Todos los cambios son
difíciles, pero esto fue casi insoportable. Parece que en el fondo, Elí no
creía que Dios sería tan severo después de todo lo él había hecho por la
nación. No fue fácil para Samuel recibir esta visión, pero fue mucho más
difícil transmitir el mensaje de Dios a Elí. La intimación de Eli, aunque muy
dura, fue la fuerza motivadora para darle coraje al joven Samuel. Elí escuchó
todo el mensaje de Dios a través de Samuel y se entregó al Señor, que es
totalmente justo. Samuel se hizo íntimo con Dios y fue parte del cambio en la
manera Dios se revelaba. Lo que faltaba era un sacerdote consagrado. El pecado
perjudica la acción de Dios entre las personas. La fama de Samuel se extendió
por toda la nación. Se ganó el respeto de todos (v.11-21).
“Que
los jóvenes consideren la forma en que Samuel fue piadoso, y aprendan de él
para acordarse de su Creador en los días de su juventud. Los niños pueden ser
religiosos. Samuel es una prueba de que el Señor está complacido de que los
niños lo escuchen y lo esperen. Samuel es el ejemplo de todos los temperamentos
amables, que son el adorno más espléndido de la juventud y la fuente segura de
felicidad ".[1]
Un
joven obediente (1 Sam 3)
1. Un joven que servía a Dios (v.1)
2. Un joven que dormía temprano (v.2-3)
La lámpara se apagó al amanecer antes del amanecer
3. Un joven que aún no conocía muy bien a
Dios (v.4-7)
4. Un joven que subió de nivel con Dios
(v.8-10)
5.Un joven que respetaba a sus mayores
(v.11-15)
6. Un joven que no mintió sino que dijo
la verdad (v.16-18)
7. Un joven que crecía amando a Dios
(v.19-21)
Un
equipaje pesado para un principiantes (1 Sam 3)
1. Pesaba el hecho de ser joven (v.1)
2. Pesaba el hecho de que Dios se
revelaba muy poco (v.1)
3. Pesaba el hecho de que el líder era
muy limitado (v.2)
4. Pesaba el hecho de que el líder
ignorase al alumno (v.3-6)
5. Pesaba el hecho de la falta de
intimidad con Dios (v.7-9)
6. Pesaba el hecho tener que colocarse
como juez del líder (v.10-18)
7. Pensaba el hecho de volverse muy conocido
(v.19-20)
8. Pesaba el hecho de que muchas personas
confiaron en él (v.21)
[1] Comentário Bíblico de
Matthew Henry pg.44 (Casa Publicadora das Assembleias de Deus - 3ª Edição -
2003)
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