Salmo 3

Salmo 3: Los beneficios de confiar en Dios

1. Este es un salmo de David cuando huía de Absalón, quien era su propio hijo. Según John Gill, cuando se escribe un salmo "para David" o "para Asaf", esto significa que es un salmo hablado por Dios y dado al escritor[1]. Absalón sedujo al pueblo para que rechazaran a David y lo nombraran rey. Así como Absalón fue un traidor de David, Judas fue un traidor de Jesús. En algún momento de la vida cristiana, todos nos preguntamos: "¿Cuál es el beneficio de seguir a Cristo?" Los apóstoles le preguntaron a Jesús qué sería de ellos que dejaron todo para seguirlo. También debemos preguntarnos si hay algún beneficio en confiar en el Señor y en qué consiste ese beneficio.

“La precisión histórica del título ha sido cuestionada (Hitzig, De Wette), pero sin razón suficiente. La composición de David es casi universalmente aceptada "[2].

2.Predicamos y vivimos un hermoso mensaje que solo quiere el bien de la gente, pero a pesar de eso ganamos enemigos, ¿por qué es así? David no estaba maltratando al pueblo, pero el pueblo se volvió contra él, ¿por qué? La inclinación natural del pecador es alejarse de todo lo que es verdadero. Satanás es aquel que anima a las personas a odiar el bien y apreciar el mal. El reino de David molestó a Satanás porque glorificaba a Dios. Satanás no amaba a Absalón, pero si pudiera usarlo para dañar la obra de Dios, haría exactamente eso. La lucha es espiritual. Esta pelea no necesita tener lógica. Solo necesitamos saber que no estamos luchando contra carne y sangre. Satanás odia a Dios y es por eso que los enemigos aumentan (v.1).

3. Cuando las personas desean el mal del creyente, no es simplemente porque no sienten amor, sino porque siguen al Diablo sin siquiera saberlo. David necesita la salvación de Dios. Él estaba expuesto y sus enemigos lo sabían. Nadie veía alguna victoria para David. "La voz del pueblo es la voz de Dios", dice el dicho popular. Tanto para David como para nosotros hay un escape contra los oponentes (v.2).

4. En medio de todo esto, el creyente llega a preguntarse si hay algún valor o beneficio en ser fiel a Dios. Muchos no se convierten en creyentes, no porque no apreciaron la Palabra predicada, ni porque no admiraban la forma de vida de los creyentes, ni porque no les gustaría tener una familia como la de los creyentes fieles. Las personas no se convierten en creyentes porque el costo es demasiado alto. Los amigos se ríen y desprecian, la familia los abandona y la sociedad los ridiculiza. Parece que el único beneficio o aumento es de los enemigos. Hay beneficio en confiar en Dios y seguir a Jesús. Él se convierte en nuestro escudo. Nuestra cabeza, es decir, nuestra vida, es exaltada. No somos exaltados en este mundo, sino ante Dios y los ángeles (v.3).

5. No hay ningún beneficio en ser creyente sin ser un verdadero seguidor de Cristo. En cuanto a su salvación, no hay nada de qué preocuparse, ya que una vez que el pecador es salvo, siempre será salvo, sin embargo, hay un perjuicio para el desarrollo cristiano. Habrá pérdida en el tribunal de Cristo y su vida no será una bendición para las personas que lo rodean. Los beneficios de la vida cristiana se miden no solo en la esfera personal, sino principalmente en la bendición en que nos hemos convertido para otras personas. El creyente aprende temprano en su viaje a clamar al Señor. Pedir ayuda a Aquel que puede ayudarnos es la actitud más sabia y dependiente de aquel que confía en el Señor. David no podía pedir por socorro al pueblo, ya que todos aplaudían a Absalón, su hijo, pero también a su enemigo. Miró al Monte Sión, la ciudad elegida por Dios para que su pueblo lo adorara. Miramos al Señor y clamamos por ayuda (v.4).

6. Si hay algo en lo que vale la pena invertir, es en dormir bien. La gente gasta dinero para su bienestar nocturno. Una cama que no cruje, un colchón suave y firme, una habitación tranquila e incluso un vecindario tranquilo. Hay preocupaciones y enfermedades que dificultan el buen descanso. David tenía razones para no dormir. Primero por la humillación que estaba atravesando y luego por miedo a los enemigos que querían matarlo. El beneficio de David al confiar en el Señor era enorme. Podía tener una buena noche de sueño y luego pensar en problemas. El salmo dice que la razón para una buena noche de descanso es porque el Señor le sostiene. Algunos darían parte de sus ganancias para tener noches de descanso (v.5).

7. El fiel creyente en el Señor gana enemigos porque Satanás es el enemigo de Dios y sus siervos. Sin embargo, los enemigos no vienen solo de un lado. Los enemigos vienen de todos lados, incluso de donde creemos que no hay enemigos. La ganancia de la vida cristiana incluye la adversidad (v.6).

8.Davi recordaba las victorias que obtuvo en el Señor. Los adversarios fueron heridos por las manos de David y su ejército. Sin embargo, todos sabemos que era Dios quien estuvo a cargo de las batallas. La mano del Señor otorga una victoria aplastante como leemos en el lenguaje de este salmo: "heriste sus mejillas" y "quebraste sus dientes" (v.7).

9. Es válido que cada creyente se siente y cuente las ganancias y pérdidas de confiar en el Señor hasta el punto de seguirlo. Quienes hacen los cálculos notarán que no hay pérdidas, sino solo ganancia. El Señor cubre a su pueblo de salvación y bendición. Podemos contar nuestra ganancia al seguir al Señor. El que tiene miedo de perder ganancias mundanas nunca experimentará los dividendos eternos de confiar solo en Dios (v.8)

Salmo 3: los beneficios de confiar en Dios

1.El que confía en Dios gana enemigos, pero también gana un escudo (v.1-3)

2.El que confía en Dios gana oponentes de todos lados, pero también gana descanso (v.4-8)

---

[1] John Gill's Exposition of the Entire Bible, Sl 3 (John Gill 1690-1771 - extraído de e-sword version 11.0.6 – 2016)

[2] The Pulpit Commentary, Sl 3 - Edited by the Very Rev. H. D. M. Spence, D.D., and by the Rev. Joseph S. Exell, M.A. (Published in 1880-1897 extraído de e-sword version 11.0.6 - 2016)