Capítulo 29: Advertencias contra la insubordinación
1. Dios no quiere destruir a nadie, por eso se insiste en la reprensión, sin embargo, resistirla resultará en una reprensión única e irremediable (Jer 19:10-11). Son repeticiones de un mismo pensamiento, con diferentes detalles. El hijo pródigo era uno de esos disipadores (Lc 15:13,30). Es triste cuando el propio padre le enseñó a su hijo ese camino. El desperdicio con inmoralidad. Además de inmoral, es una tontería, ya que ¿qué retorno hay de gastar dinero en la prostitución? El rey juzga y Dios honra, pero quien usa presentes (sobornos) hace daño a la justicia. Por supuesto, la alabanza sincera, en el momento adecuado, no se condena, pero la adulación por interés propio es una trampa contra el que está siendo alabado. Es peligroso tomarse los elogios demasiado en serio. Algunas personas se acostumbran a alabar como si fuera una obligación, lo cual se convierte en un hábito solo de palabras (v.1-5).
2. El pecado tiene un lazo que la "víctima" no siempre conoce. El camino del justo no tiene estos obstáculos, por lo que puede caminar sin preocupaciones y cantar. Los pobres son un obstáculo para los injustos (Job 29:16). La sociedad solo se ve perjudicada por los necios, pero los sabios son el equilibrio. La duda en este versículo es la segunda línea, se refiere a: 1) sabio - quien sufre cuando discute con el tonto 2) tonto - quien adopta métodos inconstantes para no "dar el brazo a torcer". No es el sanguinario al que quiere el justo, sino al sincero. El sanguinario no tiene piedad. Jesús dijo que, si alguien odia a su hermano, es culpable de asesinato (Mt 6:21-22) y (1 Juan 3:15) (v.6-10).
3. Este versículo habla de la ira. En el "pensamiento" original es "ira". Por lo tanto, el necio se expande, pero el sabio "la sosiega" ("la guarda hasta el final", como se traduce en algunas versiones). Las palabras pueden influir incluso en alguien prominente y la mentira tiene una fuerza tremenda hasta el punto de que el fiel es considerado infiel por el que acepta la mentira. Es una repetición de 22:2. Ver también Job 3:19 y Mt 5:45. El rey tiene una bendición especial si juzga a los pobres con justicia. Esto no significa que los pobres siempre serán absueltos por él, sino simplemente que no habrá parcialidad en el juicio. Absalón, el hermano de Salomón, avergonzó a sus padres. Los hijos de Eli causaron vergüenza. Y así será siempre, cuando los padres no le den tanta importancia al tema de la disciplina física (v.11-15).
“Los padres de niños pequeños a menudo se cansan de disciplinarlos. Sienten que todo lo que hacen es ... rezongar y castigar. Cuando sienta la tentación de renunciar a todo y dejar que sus hijos hagan lo que quieran, o cuando se pregunte si ha echado a perder alguna oportunidad de tener una relación amorosa con ellos, recuerde: la disciplina amable y firme les ayuda a aprender y el aprendizaje los. hace sabios. La disciplina firme y amorosa ... les enseñará a disciplinarse a sí mismos " (1).
4. Muchos sociólogos dicen: “Una persona es el resultado del entorno en el que vive”; aquí se muestra que el medio ambiente es fruto de las personas que lo habitan. Siendo así, los malvados son desarraigados y el medio ambiente mejora considerablemente. Además de beneficiar al niño, la disciplina física es buena para los padres, ya que obtendrán como resultado niños obedientes y agradecidos. Un profeta o un consejero debe ser muy estimado, como lo fueron muchos en el pasado (Sm 3:1, Nm 11:29). No significa que todos los siervos sean así, pero se refiere al sirviente obstinado. ver 1 Timoteo 6:1-2. El necio siempre es reprendido en Proverbios. Aquí hay una revelación aterradora. Ser precipitado en las palabras es tan serio (e incluso más) que ser necio (v.16-20).
5. Aquí hay una advertencia para el amo imprudente. Este último le prestó tanta atención emocional al siervo que acabó comprometiéndose con él como si fuera un hijo. Esto se aplica a otros casos: joven y chica; asesor y consejero; pastor y miembro; profesor y alumno, etc. La contienda y la ira van juntas y promueven lo mismo: el pecado. La honra que procede de Dios mantiene a salvo al humilde, aunque él ni siquiera buscó la honra. Aquí está el cómplice del ladrón, que escucha maldiciones contra el ladrón y no testifica nada. Cuando alguien es llamado a dar testimonio de lo que sabe y se niega a hacerlo, es tan culpable como el criminal, porque para la sociedad, ambos causan daño (v.21-24).
6. Una promesa de "prosperidad espiritual" para aquellos que confían en el Señor. Por otro lado, todo aquel que confíe en los recursos humanos quedará atrapado. De nada sirve refugiarse en lo que no es Dios. Los malvados y los justos son enemigos, porque si alguna vez están de acuerdo entre sí es porque el malvado se ha vuelto justo o el justo se ha vuelto malvado (v. 25-27).
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