Malaquías 2

 Capítulo 2: Pecados en la adoración y los matrimonios

 

1. Los líderes espirituales, los sacerdotes, no guiaron bien al pueblo a adorar al Señor. Dios maldecirá incluso sus bendiciones. Los sacrificios imperfectos, de animales lisiados y ciegos, no valían para Dios. Él utiliza una expresión indecorosa, pero muestra la ira de Dios sobre los líderes. Dios frotaría los excrementos de estos animales en la cara de los sacerdotes y los arrojaría junto con los excrementos. Qué declive para los hombres que deberían ser limpios. Leví fue fiel al Señor y aquí recibe mención honorífica, sin embargo, sus descendientes no siguieron la misma piedad. No solo cayeron, hicieron que otros cayeran. La responsabilidad del líder se refleja en los liderados, por lo tanto, el juicio de los líderes espirituales debe ser manifiesto a todos (v.1-9).

 

2. Otro punto de la ira de Dios sobre los que regresaron del cautiverio fue la infidelidad en el matrimonio. Aquí no se habla de divorcio, aunque se estaban divorciando para casarse con mujeres extranjeras e idólatras. Ni siquiera las ofrendas y la adoración del Señor apaciguan la ira de Dios sobre este asunto. No hay adoración verdadera mientras haya impureza entre el pueblo (v. 10-12).

 

3. Ahora sí, el tema es el divorcio. Ellos se divorciaban para casarse con mujeres paganas. Descubrieron la insatisfacción de Dios cuando llevaron sus ofrendas al altar. Dios no los aceptó. El pueblo clamaba y lloraba. Los adoradores querían una explicación de Dios. El Señor explica que no aceptaba la adoración por causa de los divorcios. Él utiliza los términos de la creación e institución del matrimonio. Dios hizo a la pareja una sola carne y ahora están rompiendo este acuerdo, esta alianza. Dios odia el divorcio. Es cierto que muchos no conocían la Palabra antes de divorciarse, pero hay muchos otros que ya conocían la Palabra cuando se divorciaron. Dios compara el divorcio con la violencia y están haciendo eso de modo tan simple como cambiarse de ropa. Dios se cansó del pueblo debido a su indiferencia ante la injusticia practicada (v.13-17).

 

“… Dios odia el divorcio. En ninguna parte el Antiguo Testamento aprueba el divorcio, aunque prescribe lo que debe hacerse bajo las circunstancias dadas en las que el divorcio acontecía (Deut. 24: 1-4; ver también Mat. 19:7, 8) ”.[1]

 

Los pecados del culto y del matrimonio (Ml 2)

1. Líderes espirituales en pecado (v.1-9)

2. Matrimonios mixtos (v.10-12)

3. Divorcios (v.13-17)

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[1]Comentário Bíblico Moody – Malaquias, pg. 10 (Editado por Charles F. Pfeiffer – Imprensa Batista Regular 4ª impressão 2001)