Capítulo 27: Pablo de camino a Roma. El cuarto viaje misionero[1]
1. Julio era el centurión de la cohorte de Augusto (de César), Lucas lo acompañaba (v.1). A Lucas y Aristarco no se les permitió viajar con Pablo como amigos, pero como sus esclavos, sí. Adramitio era una ciudad de Misia, frente a Lebos (v.2). Los barcos de Cesarea a Roma eran raros sin escalas. Pablo fue tratado bien (v. 3). El barco navegó alrededor de la isla (a sotavento,) de Chipre, frente a la costa de Cilicia (v.4). Este barco estaba cargado de grano (v.6, 38). Al sur de Creta (v.7). En el barco, la mayoría eran judíos, de ahí el ayuno del Día de la Expiación (v.10). El centurión actuó como cualquiera: escuchando al timonel y no a un religioso, como lo era Pablo (v.11). Tuvieron que buscar un puerto para pasar el invierno, porque en esa época, el mar Mediterráneo era imposible de navegar (v.12). Levantaron anclas (v.13). Euro = griego, viento del este; Aquilo = latín, noreste. Por tanto, Euroclidón, viento del noreste (v.14). Reforzaron el barco con cuerdas para que no se partiera por la mitad (v.17). Arriar las velas significa aflojar las velas. Sirte son bancos de arena, una especie de arena movediza. Después de botar la mercancía, también lanzaron el armazón, que son los utensilios del barco. Pablo no animó, sino que reprendió a los técnicos de la embarcación. El hecho de que no comieran no fue por ayuno (fue solo un día), sino por falta de apetito, debido al mar tan ondulante y al desánimo. "Perjuicio" es el daño a un barco (v.1-21).
“Por la forma del texto griego, es posible que el propietario y el capitán del barco fueran la misma persona. Si el barco hubiera sido contratado por el gobierno, el centurión, como oficial militar, también tendría autoridad sobre la navegación ”.[2]
2. El Señor le dio seguridad a Pablo (v.22-24). Él se lo dio a todos en el barco, no significa salvación de almas, en cuanto a la vida eterna, sino en cuanto al naufragio. Finalmente llegaron a la isla de Malta (o Melita, v.26). Los marineros acostumbrados escuchan el sonido del agua salpicando la arena en la distancia (v.27). Sonda o plomada es un cable con un peso en el extremo que sirve para medir la profundidad del agua (v.28). La 1ª vez 20 brazas (36 m); la segunda vez 15 brazas (27 m). Una brazas corresponde a 1,80 m. Algunos marineros oportunistas quisieron engañarlos, pero Pablo denunció su mala intención al centurión (v.30-31). Los soldados exageraron, ya que el esquife (una barca) les sería útil (v. 32). Pablo se convirtió (extraoficialmente) en el capitán del barco (v.33). Catorce días sin comer una comida completa, por lo tanto, debieron haber “mordisqueado” algo, ya que suponía un gran esfuerzo físico. Tenían comida pero no tenían apetito. Por supuesto, no fue la Cena del Señor aquí, porque no todos estaban presentes allí (v.35). Había 276 personas; Josefo dice que naufragó cierta vez con 600 personas en el mismo barco (v. 37). Curiosamente, cortaron las cuerdas de las anclas, v.40 (de hecho, cuatro anclas eran mucho peso, aunque necesarias, pero no tenían muchas alternativas). Soltaron también el timón (que da dirección al barco). La vela de proa era la vela principal. El barco tenía dos velas. Encallaron en la bahía de San Pablo, que era un banco de arena (v.41). La preocupación de los soldados era matar a los presos para no que no huyeran y tener que pagar con la vida. El centurión reconoció que todos estaban en deuda conPablo (v.43). Se cumplió la palabra de Pablo (que era la promesa de Jesús), nadie murió (v.44). Se salvaron con los restos del barco, que formaban parte de la popa, que fue destruida por la fuerza de las olas (v.41) (v.22-44).
[1] En los capítulos 27 y 28 hay muchas informaciones técnicas, las cuales fueron consultadas en “O Novo Testamento Interpretado versículo por versículo vol. 3, pg. 524-551 - Russell Norman Champlin (Editora Candeia – São Paulo – SP – 1ª ed. 1995 - 10ª impressão outubro de 1998)
[2] Notas da Biblia Reina-Valera – At 27.11 (Biblia Hispanica) (1995) (extraído de e-sword version 12.0.1 – 2019)
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