Job 25

Capítulo 25: La octava acusación contra Job (la tercera de Bildad)

Los argumentos de Bildad son tan obvios que no necesitó extenderse demasiado. Dios tiene poder sobre todas los astros celestes y sobre los ángeles. En el cielo hay una paz real que no existe aquí en la tierra. Bildad desafía a Job a contar los ángeles, los ejércitos de Dios. Son innumerables. La luz de Dios llega a todos. La luz del sol y la luz de su revelación. El hombre no tiene justicia ante Dios por sí mismo. Toda la creación de Dios es pura ante sus ojos. Todo lo que hizo era bueno. Anteriormente (15: 14-15), Elifaz dijo las mismas palabras acerca de que las estrellas no son puras a los ojos de Dios. El sol tiene una luz imperfecta en comparación con el Creador, sin embargo, él hizo que el Sol fuera perfecto para nuestras necesidades. El hombre es como carcoma, es decir, un gusano de madera. Aunque los argumentos de Bildad son ciertos, todos sabemos, a esta altura, que es un ataque contra el justo Job (v.1-6).

"En su tercera intervención, Bildad insiste en la grandeza de Dios, ante la cual nadie es inocente”[1].

"El objetivo del discurso es mostrar la presunción de Job al considerarse justo ante Dios y al querer discutir su causa con Él como víctima inocente"[2].

Palabras inflamadas (Job 21-25)

1. La vara de Dios no los azota (21: 7-13)

2. Apártate de nosotros (21: 14-15)

3. Muere en pleno vigor (21: 23-26)

4. No le diste agua para beber al cansado (22.5-11)

5. Mi queja es la de un enfadado (23.1-7)

6. El Todopoderoso es quien me turbó (23: 15-17)

7. Dios no toma esto como algo anormal (24:1-12)

8. ¿Quién me desmentirá? (24:13-25)

9. El hombre es carcoma (gusano de madera) y gusano. (25:4-6)

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[1] Notas da Biblia Reina-Valera (Biblia Hispanica) (1995), Jó 25 (extraído de e-sword version 11.0.6 – 2016)

[2] The Preacher's Complete Homiletical Commentary – Jó 25 - Edited by the Rev. Joseph S. Exell - Published in 1892; public domain (extraído de e-sword version 11.0.6 – 2016)