Salmo 138: Las responsabilidades del rey
1.David está a punto de ser colocado en el trono que es tuyo por derecho divino. Él tiene ciertas responsabilidades en su reinado. Todas se refieren a la alabanza a Dios. Todos nosotros somos reyes de alguna manera. Como jefes de hogar, de sección en una empresa, en una escuela, como maestros de escuela dominical, como padre, madre, etc. Cualquiera colocado en cualquier lugar para funcionar como líder es un rey y debe rendir cuentas a su superior por su reinado. El rey tiene responsabilidades.
“Esta obra literaria comienza como un himno de acción de gracias, pero luego se convierte en un cántico de fe. Aunque el orador se encuentra en medio de un problema, no comienza con un lamento, sino con un reconocimiento agradecido de las bendiciones divinas " 1.
2. La Palabra de Dios usa el término "dioses" para tres categorías. Puede tratarse de ídolos o demonios; pueden ser ángeles o pueden ser hombres en la función de jueces. El rey debe ser de testimonio ante todos. Él alaba a Dios de todo corazón ante las autoridades, mostrando que un rey debe reconocer que él no es Dios, sino que simplemente está investido de la autoridad de Dios (v.1).
3. El rey David no podía inclinarse hacia el templo de Jerusalén, porque aún no existía, pero estaba el tabernáculo de Moisés. El arca era el objeto de respeto. Hoy la Iglesia no tiene templos en el sentido de centro de la religión, pero esto no significa que no respetemos los lugares en que nos encontramos. Algunos quieren romper el mito del Templo, pero en realidad la Iglesia no tiene mitos. Un lugar elegido para reunirse, ya sea una cabaña o un edificio, debe estar consagrado al Señor. Dios engrandece Su Palabra por encima de todo e incluso jura por Su propio nombre. La Palabra no se puede separar del nombre del Señor, ambos están sobre todo. La Palabra de Dios está llena de bondad y verdad (v.2).
4. El rey tiene la responsabilidad de clamar a Dios por el pueblo y por sí mismo. La respuesta al clamor servirá de alabanza y testimonio a otros. Un padre tiene que clamar a Dios por sus hijos. Un pastor debe clamar a Dios por sus ovejas. Un jefe debe clamar a Dios por sus empleados, para poder pagarles fielmente y poder recompensarlos honestamente por su buen desempeño (v.3).
5. Otros reyes necesitan escuchar las palabras de Dios. El rey David anunciaría un buen testimonio a las naciones en la medida que fueran atraídas por la nación de Israel. Hoy, la Iglesia atrae y busca a los perdidos, testificándoles de la gloria de Dios. Nuestro hogar debe ser un modelo para la sociedad. Otras familias cantarán la gloria de Dios a través de nuestro testimonios (v.4-5).
6. El rey está por encima en su reino, pero Dios está por encima de todos los reinos. La humildad eleva al rey a un gobierno justo. Dios recompensa al humilde y al arrogante. Dios libera a los buenos reyes, es decir, libra a aquellos que reconocen su excelso poder. Incluso los enemigos se detienen cuando Dios quiere ayudar a quienes confían en él. Todo lo que el rey haga o toque será bendecido por Dios. Hay bondad infinita en el Señor. Las obras son del Señor y no de nuestras propias manos. La responsabilidad de todo líder, ya sea una madre, la reina del hogar o el padre, cabeza de la familia, es someterse al Rey de reyes. "Larga vida al rey". El Rey de reyes merece todos los elogios. Los reyes de la tierra simplemente lo reconocen para que en sus reinados sean bendecidos. Como reyes debemos alabar, respetar, clamar, anunciar y humillarnos (v.6-8).
Salmo 138: Las responsabilidades del rey
1. Alabar a Dios en presencia de los dioses (v.1)
2. Respetar el Templo, alabando a Dios por Su bondad y Su Palabra (v.2)
3. Clamar a Dios y alabarlo por recibir fuerza (v.3)
4. Anunciar la gloria de Dios a otros reyes (v.4-5)
5. Humillarse ante Dios para recibir liberación y protección (v.6-8)
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