martes, 28 de septiembre de 2021

Juan 9

 Capítulo 9: La cura de un ciego de nacimiento

 

1. La presencia de Jesús estaba trastornando a todos, porque estaba alterando el orden de cómo se conducía la vida de los judíos. Las situaciones que se presentaban solo empeoraban las cosas. Jesús molestó a los que asumían que tenían razón. La curación de un ciego de nacimiento se convirtió en un campo de batalla teológico que causó trastornos entre todos (v.1).

 

2. El ciego estaba indefenso contra las lenguas crueles e incluso los discípulos de Jesús tenían un concepto equivocado del pecado. Acusaron a los padres o al propio ciego. Algunos rabinos incluso llegaban a atribuirlo a algún pecado en el vientre de la madre. Cualquier teología diferente podría causar una perturbación en la mente de las personas (v.2, Deut 28:18).

 

3. Jesús veía en ese hombre un blanco de las misericordias de Dios, mientras que otros lo vieron como un blanco de discusiones teológicas. Es una afrenta al carácter de Dios pensar que Él hizo nacer a un ciego para sanarlo después de muchos años. Sin embargo, no podemos dudar de que Dios terminó usando esta situación para Su propia gloria. El hecho de que haya nacido ciego solo prueba que el mundo está habitado por el pecado, ya que la ceguera es un trastorno para todos los que la padecen. Es cierto que casi todas las personas ciegas se superan a sí mismas, e incluso superan a las que ven, en muchas habilidades, pero esto también solo prueba que Dios ha capacitado al hombre para adaptarse a muchas situaciones desfavorables. No hay perturbación que Dios no pueda corregir en nuestras vidas (v.3).

 

 

Ceguera[1]

 La primera escuela para ciegos fue fundada en París, en 1784, por Valentin Hauy, quien creó una escritura en relieve capaz de permitir la lectura táctil, un sentido muy desarrollado en los ciegos. Uno de sus discípulos, Louis Braille, que había perdido la vista a los tres años, perfeccionó el sistema que, además de letras, también incluía números y notaciones musicales. Con el impulso dado por el sistema Braille, aparecieron en Europa varias escuelas para ciegos, algunas destacadas, como la inglesa St. Dunstan, que enfatizaba los aspectos psicológicos de los estudiantes. A esto le siguió la creación en las escuelas públicas de clases especiales para niños ciegos, la primera de las cuales se fundó en los Estados Unidos en 1900. La Escuela Perkins de Boston logró una hazaña extraordinaria con la exquisita educación de Helen Keller, ciega, sorda y muda en 19 meses de edad, que ha obtenido un título universitario y ha escrito varios libros sobre la educación de los discapacitados. Desde entonces, los libros en braille han proliferado hasta el punto de que la Biblioteca Nacional para Ciegos de Westminster, Inglaterra, tiene una colección de miles de volúmenes.

 

 

4. En lugar de quedar discutiendo cuestiones teológicas o creencias, para ser más exactos, Jesús exige acción. La obra de Jesús se hace “mientras es de día”, es decir, mientras Él está en el mundo. Llegará la noche cuando Jesús ya no esté en la tierra llevando a cabo su ministerio, que envolvía sanidades. El trabajo era tanto de Jesús como de sus discípulos, así que dijo "es necesario que hagamos" (traducido así en varias versiones). Aunque Él realizó las curaciones solo. En los trastornos de la vida, tenemos la opción de no hacer nada o trabajar para revertir la situación. Tenemos que hacer algo cuando vemos algo trastornando y que nosotros podemos solucionar. Jesús tiene el poder de sanar, por lo que haría algo en beneficio de ese hombre (v. 4).

 

5. El problema del ciego era la falta de luz en sus ojos. Jesús hace una declaración muy oportuna en este caso: "Yo soy la Luz del mundo". Jesús está en el mundo por poco tiempo, por eso es la Luz mientras estuviese en el mundo, cuando deje el mundo, los creyentes serían la luz del mundo (v.5).

 

6. El ciego tendría que someterse a este gesto poco decoroso, así como Naamán tuvo que bañarse en el barroso río Jordán. Siloé significa “Enviado”, que tiene un doble significado: porque las aguas son enviadas de los manantiales y, principalmente, porque es uno de los títulos del Mesías. Fue en este lugar donde se construyó una Torre que se derrumbó y mató a 18 personas, una catástrofe conocida en la época de Jesús (Lc 13: 4). Si la vida de alguien está en crisis, no se incomodará en humillarse para volver a poner su vida en orden. El ciego no se preocupo en someterse a ese acto (v.6-7).

 

7. Él era conocido como mendigo. Algunos incluso dudaron de la identidad del ex ciego. Cuando se pone en orden la vida trastornada, lo primero que ocurre es la curiosidad de todos alrededor. La vida del creyente debería impresionar a todos. Nuestro cambio anima a todos a acercarse a nosotros para averiguar qué sucedió (v.8-9).

 

8. La curiosidad debe satisfacerse con testimonios cada vez más profundos. Por ahora, el ex ciego se limitó a contar lo que le sucedió. No podía ir más allá de esto, porque ni siquiera conocía suficientemente a la Persona de Jesús. Lo que Dios pone en orden en la vida del creyente no siempre se percibe de inmediato. Otros pueden percibirlo antes que nosotros mismos (v.10-12).

 

9. La peor ceguera no es la ceguera física, sino la ceguera espiritual. Los fariseos fueron llevados hasta ese lugar porque pensaron que era un problema religioso y, por supuesto, los líderes religiosos sabrían cómo dar la interpretación correcta de lo que sucedió, pero como estaban espiritualmente ciegos, sus vidas estaban demasiado trastornadas para comprender el poder y el amor de Jesucristo (v.13).

 

10. Jesús repitió la ofensa de la visita anterior, sanando a propósito en el día de reposo. Esta vez también, no solo porque sanó en el día de reposo, sino por el trabajo realizado. Antes le ordenaba al hombre que llevara la cama (carga) y, ahora, hacía una pasta de tierra y saliva. Entendemos que usó este método de curación para provocar a los judíos y no porque haya alguna sustancia milagrosa en la saliva para curar la ceguera. Según la interpretación tradicional de la Ley, los sábados estaba prohibido amasar pan o algo similar, lo que incluía hacer masa con tierra para las construcciones. El trastorno estaba instaurado entre el Sanedrín (v. 14-16).

 

11. El ex ciego profundizó su testimonio, diciendo que Jesús es profeta. A los vecinos les dijo que no sabía quién era y a los fariseos les respondió: “Es un profeta”. ¿A qué profeta se le puede comparar? ¿Al profeta Eliseo que le dijo a Naamán que se bañara en el Jordán? Jesús le dijo al ciego que se bañara en el estanque de Siloé. Era más que el profeta Eliseo. Él es el profeta que profetizó Moisés. La ceguera espiritual es un trastorno mayor que la ceguera física (v.17).

 

12. Colocaron en duda la ceguera del hombre, entonces preguntaron a los padres. Alguien trastornado por la ceguera espiritual duda de la acción de Dios en la vida de otras personas. Los padres atribuyeron la curación de su hijo a Jesús, un hombre del que se habló durante la fiesta, pero por temor a involucrarse y comprometerse con el Sanedrín, fingieron inocencia. En este punto del estudio del libro de Juan, debemos entender que "judíos" se refiere a las autoridades religiosas y no al pueblo judío en general. Quizás los padres querían proteger a su hijo por haber confesado que Jesús es el Mesías (o “El Profeta”) (v.18-23).

 

13. El término "Da gloria a Dios" es sinónimo de "dinos la verdad" (ver Jos. 7:19). Nuevamente, el ex ciego no se entrometió en asuntos que pertenecen a las autoridades religiosas. Si Jesús era un pecador o no es un asunto del Sanedrín y no del pueblo. El hombre declaró audazmente: "Yo estaba ciego, ahora veo". Esto ya les ha sido probado a los fariseos, comprobando la identidad del ex ciego (v.24-25).

 

14. El objetivo de los líderes religiosos no era descubrir la verdad, pues ya la sabían, sino hacer que el ex ciego “tropiece” su testimonio, para incriminarlo a él y también a Jesús. El ex ciego irrita a los líderes cuando les pregunta si ellos también quieren ser sus discípulos, indicando que de ahora en adelante seguiría a Jesús. La ceguera espiritual causa problemas debido al orgullo de reconocer a Cristo (v.26-27).

 

15. Los judíos se basaban en Moisés, pero este los condenaba. Ser discípulo de Jesús es lo mismo que ser discípulo de un “don nadie” sin origen, ya que venía de Galilea, que no tenía tradición en autoridad espiritual. Moisés fue un profeta por autoridad divina, pero este Jesús, ¿de dónde vino su autoridad? (v.28-29).

 

16. Al ex ciego le resulta extraño que se ocupen de los asuntos religiosos y aún no conozcan el origen de Jesús. Dios no escucha a los pecadores, según Sal 66:18, Is 1:15 y 59: 1-2. Los fariseos debían saber esto. Los fariseos estaban tan molestos que tuvieron que apelar a su teología débil y equivocada, es decir, el pecado de sus padres y de él mismo fue el responsable de la ceguera física. El ex ciego fue expulsado de la sinagoga como ya lo habían advertido a todos los que aceptaran las enseñanzas de Jesús. El ex ciego ya había declarado que Jesús era un profeta. Ahora el mismo Jesús le pregunta si cree en el Hijo del Hombre. Si ese hombre permaneciese perturbado por la ceguera espiritual, de nada valdría curarse de la ceguera física (v. 30-35).

 

17. Él pudo haber sido ciego, pero ahora demuestra que no tendría su fe ciega en nadie, sino sólo en Aquel que le había devuelto la vista. Este hombre fue maldecido por la sociedad. Jesús se presenta a sí mismo como Aquel que lo sanó. Cuando se lavó en el estanque de Siloé, es muy probable que no viera a Jesús, y ahora era la primera vez que veía a Jesús. Él ya había creído, y solo quería la identificación de “Hijo del Hombre”, un título muy oscuro para él en ese momento. En Juan, cuando se dice que alguien creyó, es muy difícil saber qué tipo de fe es. En este caso, es fácil saberlo, ya que este hombre fue hasta las últimas consecuencias de su fe: la expulsión de la sinagoga. Una persona ciega difícilmente se deja engañar por la voz, ya que desarrolla otros sentidos, como el oído, debido a su falta de visión. Él fue ciego, pero su visión espiritual se abrió, lo que era infinitamente más importante (v. 36-38).

 

18. En otra parte Jesús dijo que no había venido a juzgar al mundo, y aquí dice que "vino a este mundo para juicio". No significa que vino a ejercer un juicio formal, sino que Su misma presencia en este mundo es un juicio, ya que obliga a las personas a ponerse de un lado o del otro, a favor o en contra de Él (ver Mateo 12:30- 32). Aquí Jesús dice en otras palabras que la ceguera espiritual causa mucho más trastorno que la ceguera física (v.39).

 

19. Con la venida de Jesús al mundo, muchos que no veían, comenzaron a ver y muchos que veían, o más bien creían ver, se hundieron más en la oscuridad. ¿No entendieron o no quisieron comprender? Por supuesto que Jesús hablaba de ceguera espiritual y ellos lo sabían. La peor ceguera es cuando una persona cree que ve, pero es ciega. No hay peor trastorno y engaño (v.40).

 

20. Jesús responde que, si fueran ciegos, es decir, ignorantes de la Persona de Jesús, habría una solución para ellos, pero porque ven, es decir, han conocido a la Persona de Jesús y sin embargo lo han rechazado, están sumidos en las tinieblas del pecado. El juicio para aquellos que deliberadamente rechazan a Cristo es mayor que para aquellos que no tuvieron oportunidad. Y aquellos que deliberada y personalmente rechazan a Cristo, como solo lo podían hacer aquellos en el tiempo de Jesús, tienen un juicio aún mayor (v.41).

 

 

La madurez de nuestro testimonio (Juan 9)

 

1. Reconocer la ceguera del pueblo (v.1-3)

2. Reconocer la urgencia de la obra (v.4-5)

3. Reconocer el poder transformador de Jesús en nuestras vidas (v.6-12)

4. Reconocer que las personas estarán un poco confundidas acerca de lo que éramos y lo que somos (v. 13-17).

5. Reconocer que necesitamos el valor del Señor para testificar (v. 18-34)

6.Reconocer que tendremos que rendir cuentas a Jesús por nuestro testimonio o la falta de él (v.35-41)



[1] ©Encyclopaedia Britannica do Brasil Publicações Ltda (não foi anotada a data de publicação)

 

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